En la vida nos hemos enfrentado muchas veces a problemas de la clase NPI. O, al menos, eso es lo que creemos. Pues es el caso que nuestra capacidad para clasificar un problema como NPI (que en principio no equivale a la clase NPI), nos parece tan altamente decisoria y luminosamente oracular que nos parecería incluso soberbia extrema pretender que sabemos lo que sabemos no saber. Incluso, si no sabemos que sabemos algo es -en muchas ocasiones, Jourdain incluso- como si no lo supieramos, con lo que nuestra capacidad sería otra vez infalible en sus dictámenes. Ahora bien, lo cierto es que esta capacidad podría no ser sino un disfraz para la pereza misma. En lugar de DUEP ("¡Déjeme vd. en paz!", a no confundir con DUEP) decimos NPI, que es menos imperativo, aunque quizá suene grosero y no sólo por mantener en una cierta indefinición el problema propuesto.
En efecto, comencemos por la constatación de que nos encontramos frente a problemas cuya solución desconocemos y tememos seguir desconociendo por más que buenamente nos pongamos a ello: "Ni lo sé ni sé dónde puedo averiguarlo". Sin embargo tal situación es contradictoria en sí misma, pues en ningún momento negamos que el problema carezca de solución. Es más, si aceptamos que podemos buscar en libros o en Internet, ¿por qué excluir el recurso a otro humano más capaz en los menesteres de que se trate? - Aquí ciframos la madre del cordero: "Recurra vd. o pregunte a otro, que esto que me dice MLTF" (no se trata de MLTF). En cierto modo, nuestra perezosa ignorancia contiene ya la solución de un problema NPI. Sabemos que si nos ponemos a ello, obtendremos la solución en un tiempo razonable con una probabilidad muy alta.
En efecto, comencemos por la constatación de que nos encontramos frente a problemas cuya solución desconocemos y tememos seguir desconociendo por más que buenamente nos pongamos a ello: "Ni lo sé ni sé dónde puedo averiguarlo". Sin embargo tal situación es contradictoria en sí misma, pues en ningún momento negamos que el problema carezca de solución. Es más, si aceptamos que podemos buscar en libros o en Internet, ¿por qué excluir el recurso a otro humano más capaz en los menesteres de que se trate? - Aquí ciframos la madre del cordero: "Recurra vd. o pregunte a otro, que esto que me dice MLTF" (no se trata de MLTF). En cierto modo, nuestra perezosa ignorancia contiene ya la solución de un problema NPI. Sabemos que si nos ponemos a ello, obtendremos la solución en un tiempo razonable con una probabilidad muy alta.
De otra manera: no sólo sabemos que el problema NPI tiene solución, sino que nos atrevemos a comparar el coste de lograrla con nuestras ganas de tomarnos la molestia. Pecamos por exceso, como se ve.
Consultado el señor Google por la cadena "NPI", nos vemos en la obligación de declarar que no tenemos NPG (no nos referimos a NPG) de ordenar o comentar los resultados obtenidos. Eso sí, convenientemente expandida esa misma cadena dentro de las comillas, obtenemos 118.000 resultados aprox. (nada más lejos de aprox.). Es de suponer que en su mayoría corresponden a foros y otros lugares de expansión, pero no tengo una idea muy clara (IMC, que no es lo mismo que IMC). Día 29, 11:35 TMC (a no identificar con TMC ).
1 comentario:
Genial. Lo has copiao :-)
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